El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil tramitó durante el año pasado más de 4.500 denuncias relacionadas con el vertido de residuos peligrosos, radioactivos y sanitarios en la provincia malagueña, según los datos del balance anual de esta unidad. Los agentes formularon además 362 denuncias por falta de control sanitario en alimentos, animales y vegetales y detectaron 3.407 infracciones administrativas.
Durante el año pasado, los guardias civiles del Seprona instruyeron 125 diligencias por delitos y faltas contra la naturaleza, detuvieron a cinco personas e imputaron a 37. Según informó la Guardia Civil en un comunicado, 27 fueron imputadas por infracciones cometidas en materia de ordenación del territorio, ocho por incendios forestales, tres en materia de caza, pesca y especies protegidas y una por comercio ilegal de especies exóticas -vulneración del Convenio sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres-. En toda España, el Seprona recuperó 8.659 especímenes de especies protegidas y se incautaron de 1.908 ejemplares con los que pretendían comercializar.
La vulneración de la ley de caza, pesca y tenencia de especies protegidas generó 753 denuncias por infracciones penales y administrativas.
Por último, se detectaron 1.775 infracciones cometidas en materia de ordenación del territorio con motivo de la realización de obras y edificaciones.
El Servicio de Protección de la Naturaleza tiene como misión específica "velar por el cumplimiento de las disposiciones que tiendan a la conservación de la naturaleza y medio ambiente, de los recursos hidráulicos, así como de la riqueza cinegética, piscícola, forestal y de cualquier otra índole relacionada con la naturaleza", recordaron en la nota.
La Opinión de Málaga, 20/03/08
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