El precio de acabar con la peor plaga de las palmeras

La eficacia de los productos químicos es del 70%, aunque son costosos y requieren de personal autorizado.

El picudo rojo avanza sin control por toda la Costa del Sol y sólo los tratamientos preventivos y curativos están haciendo algún efecto para ponerle freno a la plaga. Son complejos y costosos, pero los resultados invitan a la esperanza. La aplicación de productos químicos en las palmeras afectadas está demostrando una eficacia cercana al 80% en algunos casos y hay experimentos que ya están demostrando que en un futuro se podría acabar con el escarabajo gracias a los depredadores naturales.

Los métodos para combatir la plaga varían en función del tipo de palmera y del nivel de afección, y suelen rondar los 110 euros anuales. Lo más habitual es aplicar un tratamiento foliar mediante productos químicos en el cogollo, al menos, unas cinco veces al año. Sólo el precio de estos líquidos ronda los 20 euros anuales y necesitan de personal especializado para su utilización.

La endoterapia también está ganando adeptos y ya se aplica en la mayoría de los casos tanto para prevenir como para curar. Jesús Moreno, de la empresa Agrotrapiche Servicios Agrícolas de Vélez-Málaga, asegura que se ha demostrado que su eficacia está entre el 70 y el 80% y consiste en inyectar al tronco del árbol un producto químico para que la savia de la palmera transporte el veneno hasta la copa "y mate al mayor número de escarabajos posible".

Su precio, sin contar la mano de obra, es de unos 95 euros e incluye cinco aplicaciones. Pero Moreno señala que aunque pueda parecer costoso "al final compensa el gasto que supone reponer una palmera", según este experto.

A pesar de su coste, las empresas especializadas en este tipo de servicios no dan abasto para atender la creciente demanda de particulares, comunidades de vecinos y ayuntamientos que no saben qué hacer para combatir al picudo. Sólo la empresa Agrotrapiche, que lleva trabajando casi 13 años en la lucha contra el picudo rojo, trata anualmente una media de 5.000 palmeras al año desde San Pedro de Alcántara hasta Nerja. El control biológico podría ser el futuro del fin de la plaga. Los experimentos que se han realizado en laboratorio con nematodos (un tipo de parásitos) hacen pensar que la solución está cerca. Cualquier ayuda es poca para acabar con un escarabajo que ya ha acabado con la vida de miles de palmeras sólo en la Costa del Sol.

Málaga Hoy, 14/03/08