Un complejo alfarero de la época islámica quedó dañado tras las actuaciones de la constructora.
La Fiscalía de Medio Ambiente de Málaga ha formulado una denuncia contra dos socios de la empresa que promueve las obras de unas viviendas situadas en la calle Dos Aceras de la capital malagueña por causar supuestamente daños en un complejo arqueológico alfarero de la época islámica, que podrían fecharse entre los siglos XIII y XV.
Según fuentes fiscales, en el transcurso de unas obras de viviendas y aparcamientos, en el número 48 de la calle, aparecieron restos de un complejo alfarero perteneciente al Arrabal de Fontanilla, por lo que se realizaron excavaciones arqueológicas durante el pasado mes de agosto, controladas por la Delegación de Cultura de la Junta.
Posteriormente, en el mes de diciembre, «aprovechando que los arqueólogos se habían ido de vacaciones por el puente de la Inmaculada», se realizaron trabajos por parte de la empresa constructora para agilizar las obras, que, presuntamente, causaron daños en los restos encontrados. Al volver los trabajadores se encontraron con una sorpresa de lo más inusual; habían hecho el trabajo por ellos.
En cuatro días rebajaron el terreno más de un metro y sacaron una treintena de sacos con restos arqueológicos que ni siquiera se llevaron. Los dejaron apilados en la parcela. Eran materiales cerámicos como candiles, jarrones, cuencos o lebrillos, según precisó a este periódico Carmen Íñiguez, la adjudicataria de estos trabajos arqueológicos.
Días previos
En días previos a las excavaciones ilegales, los arqueólogos estaban adoptando las medidas imprescindibles para documentar y conservar los restos en perfecto estado, pero con los movimientos de tierra el complejo alfarero se vio afectado.
La denuncia se ha formulado contra dos socios de la empresa por un delito contra el patrimonio por imprudencia. Así, el Código Penal recoge en su artículo 324 que el que por imprudencia grave cause daños, en cuantía superior a 400 euros, en bienes de valor artístico, histórico, cultural, científico o monumental, así como en yacimientos arqueológicos, será castigado con la pena de multa de tres a 18 meses, atendiendo a la importancia de los mismos.
El escrito ha sido remitido por la Fiscalía al Juzgado Decano para que se proceda al reparto en uno de los juzgados de Instrucción de la capital, donde se llevará a cabo la correspondiente investigación de los hechos denunciados. Con esta denuncia la Fiscalía espera que se «se depuren responsabilidades porque se trata de un bien patrimonial que debería conservarse».
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