El Consistorio quiere nombrar Monumento Natural a su castaño santo pero su situación, en una finca privada, dificulta la obtención de este reconocimiento.
Nadie sabe a ciencia cierta su edad, pero todos coinciden en que se trata del vecino más longevo de Istán y de, incluso, toda la provincia malagueña. El "abuelo del bosque", como lo llaman algunos senderistas, es un castaño de cerca de 30 metros de altura y cuyo tronco supera los 13, de diámetro.
El castaño santo, como es conocido popularmente, está a la espera de ser nombrado oficialmente Monumento Natural por la Junta de Andalucía; un título que, en la práctica, todos se lo dan por adjudicado.
Su excepcionalidad como ejemplar botánico de enorme belleza y, sobre todo, su perdurabilidad en el tiempo como árbol que se calcula que pueda rondar entre 700 y 1.000 años de historia convierten su nombramiento en irrefutable. Pero sólo existe una pega.
"Está situado en suelo privado y la figura de Monumento Natural está dirigida a árboles que están en suelo público", explicó a este diario el alcalde del municipio donde el castaño tiene sus raíces, José Miguel Marín.
Marín adelantó que la labor actual del Ayuntamiento consiste en acercar posturas entre los propietarios de la parcela y la Administración autonómica con el fin de que reciba este reconocimiento y, con él, la protección que merece. "Queremos conservarlo y mejorar los accesos para que pueda ser visitado", aclaró el regidor, quien tiene claro que se trata de una de las reseñas más importantes de Istán. Un simple periplo por las páginas web de senderistas y rutas verdes así lo atestiguan.
El castaño santo se ubica en una zona llamada el Hoyo del Bote, en la Sierra Real de Istán. Para llegar hasta él, es necesario tomar una ruta en bicicleta que comienza en el pueblo o acceder desde la carretera de San Pedro de Alcántara hasta rodear el Club de Golf La Quinta y seguir por el carril izquierdo del primer puente que se interpone en el camino.
Paraje incomparable. "Es uno de los paseos de montaña más agradables que se pueden hacer", citan los distintos usuarios de foros ecologistas de internet. Todo el que ha recorrido el sendero de alrededor de 13 kilómetros que lleva hasta el castaño coincide en que se trata de un "paraje incomparable", tanto a la ida como a la vuelta, al sumar además la Sierra de las Nieves como fondo, antes de atisbar el árbol, y las vistas al pantano de Río Verde, tras visitarlo.
Además de vegetación, las leyendas también han crecido a la sombra de su larga historia. Cuentan que, bajo su copa, el mismísimo Fernando el Católico celebró los éxitos de la batalla de la reconquista contra los moriscos allá por el siglo XVI, tras la rebelión de Sierra Bermeja. Incluso, se asegura que se ofició una misa de acción de gracias.
Un siglo después, sería el duque de Arcos, Luis Ponce de León, quien daría fin a la rebelión musulmana y escogería al frondoso castaño para acampar, junto con sus miles de soldados. No existe documentación que acredite con certeza estas hazañas. Pero quién sabe, si el árbol hablara, si éstas u otras muchas ´batallitas´ contaría.
La Opinión de Málaga, 14/10/2008
El castaño santo, como es conocido popularmente, está a la espera de ser nombrado oficialmente Monumento Natural por la Junta de Andalucía; un título que, en la práctica, todos se lo dan por adjudicado.
Su excepcionalidad como ejemplar botánico de enorme belleza y, sobre todo, su perdurabilidad en el tiempo como árbol que se calcula que pueda rondar entre 700 y 1.000 años de historia convierten su nombramiento en irrefutable. Pero sólo existe una pega.
"Está situado en suelo privado y la figura de Monumento Natural está dirigida a árboles que están en suelo público", explicó a este diario el alcalde del municipio donde el castaño tiene sus raíces, José Miguel Marín.
Marín adelantó que la labor actual del Ayuntamiento consiste en acercar posturas entre los propietarios de la parcela y la Administración autonómica con el fin de que reciba este reconocimiento y, con él, la protección que merece. "Queremos conservarlo y mejorar los accesos para que pueda ser visitado", aclaró el regidor, quien tiene claro que se trata de una de las reseñas más importantes de Istán. Un simple periplo por las páginas web de senderistas y rutas verdes así lo atestiguan.
El castaño santo se ubica en una zona llamada el Hoyo del Bote, en la Sierra Real de Istán. Para llegar hasta él, es necesario tomar una ruta en bicicleta que comienza en el pueblo o acceder desde la carretera de San Pedro de Alcántara hasta rodear el Club de Golf La Quinta y seguir por el carril izquierdo del primer puente que se interpone en el camino.
Paraje incomparable. "Es uno de los paseos de montaña más agradables que se pueden hacer", citan los distintos usuarios de foros ecologistas de internet. Todo el que ha recorrido el sendero de alrededor de 13 kilómetros que lleva hasta el castaño coincide en que se trata de un "paraje incomparable", tanto a la ida como a la vuelta, al sumar además la Sierra de las Nieves como fondo, antes de atisbar el árbol, y las vistas al pantano de Río Verde, tras visitarlo.
Además de vegetación, las leyendas también han crecido a la sombra de su larga historia. Cuentan que, bajo su copa, el mismísimo Fernando el Católico celebró los éxitos de la batalla de la reconquista contra los moriscos allá por el siglo XVI, tras la rebelión de Sierra Bermeja. Incluso, se asegura que se ofició una misa de acción de gracias.
Un siglo después, sería el duque de Arcos, Luis Ponce de León, quien daría fin a la rebelión musulmana y escogería al frondoso castaño para acampar, junto con sus miles de soldados. No existe documentación que acredite con certeza estas hazañas. Pero quién sabe, si el árbol hablara, si éstas u otras muchas ´batallitas´ contaría.
La Opinión de Málaga, 14/10/2008
No hay comentarios:
Publicar un comentario